viernes, 26 de octubre de 2012

Tercera práctica

Y llego el gran día, la práctica más deseada... la verdad es que esperaba con ansias que llegara este día,  tenía muchas ganas de aprender a trastear la cámara y poder retocar las fotos. Empezamos la sesión con un maravilloso paseo por las calles del puerto y de la marina, tenemos que reconocer que somos unos privilegiados, ya que tenemos unas calles y unos lugares maravillosos para poder contemplar y realizar fotografías originales, diferentes, especiales... Yo ya tenía una idea clara de lo que quería realizar, mi intención no era hacer fotos a personas, sino fotos diferentes, fotos que no hacemos a diario, es decir buscar cosas que en el día a día no les daríamos importancia y pasarían desapercibidas para nosotros.
Una vez realizamos un pequeño recorrido por esas maravillosas calles volvimos a la clase y empezamos a retocar las fotos gracias a las instrucciones que Marina Ribas nos iba diciendo. Nos explico algunas cosas del programa y después nosotros mismos empezamos a trastear y a descubrir que se pueden hacer infinidad de cosas con este programa.
La verdad es que disfrute mucho de esta práctica, y si algún día tengo la oportunidad me gustaría apuntarme a algún taller de fotografía para poder aprender más cosas. Algunas veces, cuando me encuentro saturada y necesito despejarme, cojo mi cámara y me voy a disfrutar de los diferentes lugares que nos ofrece la isla, muy variados pero todos ellos maravillosos.
Aquí os dejo tres de las fotografías que realicé en la práctica y que luego retoque.




viernes, 19 de octubre de 2012

Segunda práctica

En esta segunda práctica del "banc del temps" me tocaba a mi enseñar ha hacer unas cosas que se llaman yoyos o figuetas que se hacen con tela, son como unas decoraciones que se pueden aplicar en camisetas, cestos, diademas, etc.
Para esta práctica solo necesitábamos unos retales de tela, hilo, aguja, tijeras y unos trozos de cartón para hacer los moldes.
Nos pusimos manos a la obra, mis compañeros se fueron agrupando en diferentes mesas, así que yo me iba moviendo por la clase explicando lo que tenían que ir haciendo. La verdad es que el tiempo pasaba volando, algunos iban más rápido, otros iban más lentos, pero finalmente todos pudieron acabar la práctica con éxito.
Lo de trabajar en grupos diferentes fue bastante bien, porque había grupos que iban más adelantados que otros y así me daba tiempo de ir pasando por todas las mesas y ayudarlos e ir explicando lo que tenían que ir haciendo.
Aquí os dejo el resultado de un cesto forrado de "figuetas" que yo realicé hace algún tiempo.

                                        

Otra de las práctica que realizamos este mismo día fue crear llaveros o broches con fieltro. Rosa que era la compañera que nos enseñaba a hacerlo trajo los patrones impresos en folios para ahorrarnos un poco de trabajo. Nos pusimos manos a la obra y cada una fue recortando los patrones de la mariquita encima del fieltro que habíamos traído de casa. Ella nos iba guiando, y nosotros íbamos cosiendo poco a poco. La verdad es que salieron unos llaveros y unos broches muy divertidos.

Cortando los patrones




Cosiendo las diferentes partes



                               

Resultado Final 


En las imágenes habéis visto el proceso y el resultado final. La verdad es que se pueden hacer cosas muy bonitas y diferentes con este material. Si uno tiene un poco de imaginación se pueden hacer broches de diferentes personajes, flores, hasta se pueden llegar a realizar móviles para las habitaciones de los más peques de la casa.

Primera práctica del "Banc de temps"

En la asignatura de projectes artístics en la primera infància vamos a trabajar sobre un proyecto que se llama "Banc de temps". Aquí tendremos la posibilidad de aprender todos de todos, ya que cada uno de nosotros debe ofrecerse para enseñar algo que sepa hacer y también algo que quiera aprender. Pienso que es un proyecto muy bonito y en el cual podemos aprender muchas cosas.

La primera práctica que realizamos fue aprender a realizar masajes a bebes. Nuestra compañera Lucía, que era la que se había ofrecido a enseñarnos a realizar masajes se puso manos a la obra. Se me olvidaba decir que cada uno tuvo que traer un bebe de casa para hacerle el masaje. Para empezar la sesión nos sentamos todas en círculo para poder atender mejor las explicaciones que Lucía nos iba dando.
La verdad es que fue una práctica muy sencilla pero de la cual aprendí dos cosas nuevas, cuando a los niños les duele la barriguita es bueno masajear haciendo círculos con las yermas de los dedos y otra de las cosas que no había escuchado nunca es que cuando los niños tienen gases es bueno hacerles como una "L" en la barriga con las yemas de los dedos para ayudarles a expulsar los gases o para ayudarles cuando tienen problemas para hacer sus necesidades.

Aquí os dejo una foto que tomaron mis compañeras mientras yo le hacía el masaje a mi bebe.